Los precios de la electricidad no paran de subir, por lo que cada vez más usuarios se plantean dar el paso a la fotovoltaica para ahorrar en la factura de la luz. Pero… ¿Es muy costoso instalar placas solares? ¿Cuánto cuesta una instalación solar fotovoltaica en 2023?
Hoy, en SOLARIX, hablamos de aquello que preocupa a todo el mundo pero de lo que no suele ser tan frecuente hablar abiertamente… ¡de dinero!
Principales costes de una instalación solar fotovoltaica

El rango de precios de una instalación solar puede ser muy amplio. Y es que existen distintas tipologías de instalaciones (conectadas a red o aisladas), diferentes escalas (residencial o industrial) e incluso distintas necesidades (sistemas que funcionen en caso de fallo de red).
Además, cada proyecto tiene unas especificidades concretas, por ejemplo en materia de la propia instalación del sistema, que pueden influir en el precio final del sistema fotovoltaico.
No requiere el mismo trabajo instalar placas en una cubierta de acceso sencillo y a un agua, que instalar sobre un tejado de morfología compleja que requiere separar en campo fotovoltaico en varios grupos, o que requiere medios de elevación para subir el material, etc.
Dicho lo anterior, sí hay unas partidas sobre el conjunto del presupuesto fotovoltaico que habitualmente suelen tener más peso que otras.
- Baterías: instalar acumuladores en un sistema fotovoltaico es costoso. Pese a que las baterías han avanzado mucho y sistemas vanguardistas como las baterías de litio han reducido notablemente su precio. No es extraño que sobre las baterías recaiga un 50% o incluso más del coste total de la instalación. El precio concreto depende mucho del modelo y sobre todo de la capacidad en kWh, pero no es raro que la batería de litio para un hogar alcance los 4.500 euros e incluso más.
- Paneles solares: elemento primordial de la instalación solar fotovoltaica, ya sea conectada a la red o aislada. Podemos encontrar distintas calidades y potencias, por lo que una vez más la horquilla puede variar bastante. Pero para tener un orden de magnitud, un panel de unos 455 Wp de buena calidad (que no premium) rondaría los 220 euros. Para un campo fotovoltaico de una vivienda unifamiliar de 3,64 kWp, 8 placas, hablamos de casi 1.800 euros.
- Generador: los generadores sólo se emplean en aisladas para que las baterías no caigan por debajo de un determinado umbral de carga. Para una vivienda habitual aislada y si nos decantamos por un arranque por contactos (automático), este dispositivo puede sobrepasar los 1.500 euros.
- Inversor: el inversor solar fotovoltaico es el corazón de toda instalación, ya que se encarga de convertir la electricidad continua suministrada por los paneles en electricidad alterna. La que consumen los dispositivos presentes en tu hogar. Los inversores trifásicos son más caros que aquellos aptos para suministro monofásico. También suelen ser más caros los híbridos (capaces de trabajar con baterías) que los que no lo son Como cifra muy general, un inversor fotovoltaico monofásico para tu hogar puede rondar los 1.000 euros, pero depende mucho del modelo en cuestión y de sus especificaciones concretas.
¿Cuál es el rango de precios de una instalación solar?
Vamos al meollo… ¿Cuánto cuesta una instalación solar fotovoltaica? Pues depende, como ya hemos adelantado, de muchos factores… para acotar un poco vamos a centrarnos en el ámbito residencial:
Cuánto cuesta una instalación fotovoltaica aislada residencial
Dos de los cuatro elementos citados anteriormente (generador y baterías) son esenciales para las instalaciones solares fotovoltaicas aisladas de la red. Al menos en el caso de una vivienda habitual. Por lo tanto y como primera premisa, una instalación aislada de la misma potencia instalada en fotovoltaica (kWp) es más costosa que su homóloga conectada a red.
Ahora bien, las instalaciones aisladas tienen una naturaleza distinta, ya que su objetivo no es ahorrar en la factura de la luz, sino dotar de suministro a un inmueble que carece de acceso a la electricidad.
Es por eso que las instalaciones fotovoltaicas aisladas se realizan también a una escala mucho menor. Instalando únicamente unas pocas placas y una pequeña batería para almacenar consumos muy escuetos (bombillas, algún televisor…). Algo que no haríamos en el caso de una instalación de autoconsumo convencional conectada a red, ya que instalar un par de placas no aportaría un impacto significativo sobre la factura.
¿En qué se traduce todo lo anterior? ¿Cuánto cuesta una instalación aislada de la red?
Pues desde unos 500 € para el caso de una pequeña caseta que precise algo de iluminación, hasta 12.000 euros o más si estamos ante una vivienda habitual.
Cuánto cuesta una instalación fotovoltaica residencial conectada a red

En la actualidad la mayoría de instalaciones que se realizan en España están conectadas a la red. Aquí no empleamos generador y podemos o no emplear baterías.
El precio para una instalación en una vivienda habitual unifamiliar, sin baterías pero con los consumos de una familia media (hablamos de precio ya instalada, legalizada y con puesta en marcha) puede rondar los 6.000 euros.
Hablamos de una instalación óptima para clientes con facturas de más de 100 euros el mes.
Todo depende, por supuesto, de los consumos del cliente en cuestión y de la tecnología a emplear. Por ejemplo, es más barato optar por un inversor central sin optimizadores, que por un sistema con inversor + optimizadores.
Es interesante destacar que si una vivienda tiene consumos algo mayores, el precio no se incrementa demasiado. Ya que elevar un poco la potencia del inversor e instalar algunas placas más no tiene una gran repercusión sobre el presupuesto. Ahora bien, dar el salto a una instalación de mayor potencia pero que además es trifásica, implica no sólo más potencia en paneles y en inversor, sino un coste añadido en el inversor trifásico y también en los elementos de protección del sistema.
Ya has visto cuánto cuesta una instalación… ¿Pero es «cara» o «barata»?
Hablar de dinero no tiene mucho sentido si no hablamos de rentabilidad. Y es que la fotovoltaica y las renovables en general son elementos indispensables en la transición ecológica. Pero a menudo la razón primordial para instalar placas, ya sea en viviendas o en empresas conectadas a red, es ahorrar en la factura de la luz.
A fecha actual, una instalación fotovoltaica como la que comentábamos anteriormente puede amortizarse en unos 5 años.
Aunque esta cifra depende de tu ratio de autoconsumo, de los costes de la energía, etc. En SOLARIX además de darte presupuesto te proporcionamos siempre un estudio detallado sobre la rentabilidad del sistema fotovoltaico que te proponemos.
Ten en cuenta que los componentes de una instalación fotovoltaica suelen tener una vida útil de 25 años e incluso más (a excepción de las baterías). Por lo que, transcurridos esos 5 años, tienes un gran horizonte por delante de electricidad limpia y gratuita.
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